Acción
solidaria forma parte del compromiso adquirido por las bases hace más de un
año, donde se busca entregar ayuda a los damnificados, por lo que se aportó con
dos cajas con mercadería para cada una de las familias del sector El Olivar
Bajo y Alto de la ciudad jardín.

El 3 y 4 de
febrero de 2024 un trágico incendio cambió la vida de más de 2 mil familias de
Viña del Mar y Quilpué, lo que dejó como saldo más de 100 muertos y casi dos
mil familias sin hogar. A raíz, de esto, los socios del Sindicato Industrial de
Integración Laboral de Codelco División Andina se comprometieron a ir en
ayuda  a los damnificados por esta
tragedia.

Si bien ha
pasado más de un año y 8 meses del incendio, los pobladores recibieron ayuda
por cerca de un año y posteriormente se olvidaron de ellos, donde además el
proceso de reconstrucción ha sido muy lento y muy pocas casas han podido volver
a instalarse.  Es por ello, que la
directiva del Sindicato SIIL tomó contacto con dirigentes sociales de El Olivar
Bajo y Olivar Alto, dos de las zonas más afectadas por el incendio y brindó
esta ayuda, que fue muy bien recibida por cientos de vecinos, en su gran
mayoría adultos mayores.

Al
respecto, Ignacio Celis, primer director del Sindicato SIIL comentó que “me voy
satisfecho por la ayuda entregada, pero con sentimientos encontrados por el
abandono de estas familias de parte de la autoridades y lo lento del proceso de
reconstrucción, pero lo importante es haber entregado esta ayuda a 200 familias
afectadas”.

Por su
parte, Oscar Villalobos, tesorero del Sindicato SIIL manifestó que “con esto
cumplimos con el compromiso de las bases, los mineros somos solidarios y esta
ayuda nos llena de orgullo al ver el agradecimiento de la gente afectada”.

Cabe
mencionar, que gran parte de los beneficiados con este granito de arena son
adultos mayores y gente que perdió todo en el incendio.

Nancy
Lemus, dirigente social del sector El Olivar alto de Viña del Mar señaló que “ha
sido un proceso triste para los vecinos, el Gobierno ha estado muy lento en la
reconstrucción y se olvidaron de la gente, hace más de un año que no llegaba
ayuda y que ustedes que vienen desde Los Andes se acuerden, nos llena de
esperanza por lo que estamos muy agradecidos”.

Es justo señalar, que quedan muchas familias sin ayuda y este sólo es un granito de arena, por lo que por lo visto y la realidad de esta gente, se cree que es necesario volver ayudar a los damnificados, siguiendo la senda y el compromiso de los mineros que siempre han sido solidarios en este tipo de catástrofes.